Pasajero podría ir a la cárcel por tocarle la entrepierna a un auxiliar de vuelo y preguntarle: “¿Eres gay?”

Con la cantidad de vuelos que salen de cientos de aeropuertos del mundo son muchas las anécdotas positivas y negativas que se producen como cuando en junio del año pasado la aerolínea Emirates estuvo en el punto de mira por “humillar” a una pareja gay que viajaba con su hijo o como cuando auxiliares de vuelo homosexuales de Air France pidieron en Change.org poder negarse a volar a Irán. Pero el caso que os vamos a contar nos ha sorprendido y mucho. El protagonista es un pasajero británico de 45 años de edad que se llama Thomas Sleigh que  ha sido encontrado culpable de agresión sexual contra un miembro de la tripulación de un vuelo de Ryanair que cubría el trayecto del aeropuerto Murcia-San Javier al de Manchester.

La fiscal Nicole Durham relató que Sleigh viajaba de regreso a Manchester con su mujer e hija el pasado 7 de septiembre de 2016. Según la fiscal, el hombre declaró que había bebido tres latas de cerveza antes de subir al avión y que su hija había estado bebiendo alcohol que no compró en el avión. Cuando un auxiliar de vuelo se acercó al grupo pidiendo que recogieran las lata que habían tirado al suelo, Sleigh entonces “le agarró y sacudió” los genitales tras preguntarle “si era gay”.

En el testimonio ofrecido por el denunciante ante el tribunal, dijo que: “No respondí a su pregunta. Retrocedí en estado de shock y le dije: ‘Nunca más me toque en esa zona’”. Según explicó la fiscal, la hija de Sleigh le dijo que su padre “estaba bromeando” y el pasajero le increpó: “¿Así que crees que es una broma tocar en esa área? ¿Cómo te gustaría?”.

Tras el incidente, el auxiliar de vuelo puso en conocimiento de sus superiores lo que había sucedido y Sleigh fue arrestado cuando el avión aterrizó en Manchester.

En su alegato la fiscal Nicole Dirham concluyó que: “Esta persona ha sido atacada por su sexualidad percibida” mientras que Sleigh alegó que él tocó la ingle de la víctima “por accidente” ​​ y que no tenía ningún problema con los homosexuales porque su hijo es gay. Mientras una testigo presencial explicó ante el tribunal que no creía que Sleigh tocara a la víctima por accidente.

Sleigh escuchará la sentencia ante el Tribunal de Magistrados de Manchester el próximo 23 de marzo después de concederle la libertad tras pagar una fianza.

Sleigh afirmó durante el juicio que había sido un accidente fortuito pero ahora podría ser condenado hasta 10 años de cárcel y su nombre podría aparecer en el registro de delincuentes sexuales cuando salga su sentencia definitiva a finales de este mes.