Madonna, la diva gay que dijo “No confío en ningún hombre que no haya besado a otro” cumple hoy 59 años

La vimos enarbolando la bandera arco íris en San Petersburgo en 2012 contra las leyes antigay de Putin o en la multitudinaria Marcha de las Mujeres de Washington, cuando se eligió al nuevo inquilino de la Casa Blanca este año ofreció un discurso que no dejó indiferente a nadie: “He pensado en hacer explotar la Casa Blanca, pero escojo el amor. Es una rebelión de mujeres que nos negamos a aceptar una nueva era de tiranía. La lucha por el derecho a ser libres, a ser quienes somos, a ser iguales. Marchemos juntos a través de esta oscuridad y en cada paso sepamos que no tenemos miedo, que no estamos solos, que no retrocederemos. Que hay poder en nuestra unidad”, le dijo a Trump.

Lo creas o no, Madonna Louise Veronica Ciccone cumple hoy 59 años. Desde que irrumpió en la escena pop con Holiday en 1983, la superestrella nacida en Michigan ha vendido más de 300 millones de discos. Esto la convierte en una de las cinco artistas más vendidas de todos los tiempos, y con el disco millonario “Rebel Heart” de 2015, sigue pisando fuerte.

Controvertida, polémica, vanguardista, la leyenda viva de la música pop es considerada por la cultura LGBT como un icono. Según la intérprete, su acercamiento con la comunidad se inició durante su adolescencia, inducida por su profesor de baile, Christopher Flynn, un hombre abiertamente homosexual. Más tarde, la influencia de Flynn sobre Madonna se vería reflejada en su vida personal y en su carrera. La experiencia y carisma de Flynn en el mundo artístico traerían sus frutos con Madonna, con quien después de entablar una buena amistad, frecuentaban juntos los bares y discotecas gays de Detroit, Michigan, ciudad origen de la artista.

En 1976, Madonna recibió una beca de cuatro años para estudiar danza en la Universidad de Michigan, en Ann Arbor. Aunque estaba estudiando allí, durante esta etapa la cantante no dejó de asistir a las clases de Flynn. Después de un tiempo, asistió a la Universidad de Durham en Carolina del Norte, para un curso de baile de seis semanas. Para ese entonces, decidió dejar la universidad y se mudó a la ciudad de Nueva York para perseguir una carrera profesional como bailarina. Si bien su padre no apoyaba esta decisión, Flynn la animó y le dio su apoyo. Ambos siguieron siendo amigos, hasta la muerte de él en 1990, a causa del sida.

Carol Linzt, profesor de francés de la artista, recuerda que Madonna estaba tan influenciada por sus experiencias en los bares gays, que ya ni siquiera necesitaba una pareja para bailar.

Pau Pitarch en el libro “Pasen y vean: estudios culturales” sugiere que en 1988 comienzan sus primeras alusiones a la supuesta homosexualidad de Madonna de la mano de su amiga y actriz Sandra Bernhard. Realizan en público lo que ella denomina «juegos», una serie de actuaciones que aluden a una relación. Pitarch dice: “Penetrar en la identidad sexual de Madonna no resulta tan relevante como descubrir cómo logra eludir la definición para autorrepresentarse como la liberadora de las tecnologías del “yo” que alimenta el puritanismo estadounidense”.

Algunas canciones que aluden a su numeroso público homosexual son «Express Yourself» (1989) y «Vogue» (1990), siendo la última una inspiración de la subcultura gay de la ciudad de Nueva York, iniciada con el baile del mismo nombre de la década de 1970. De hecho, Muchas de sus canciones a menudo sugieren una identificación con la comunidad gay. Los autores del Madonna’s Drowned Worlds creen que cuando la artista canta “Vamos chicas, ¿creen en el amor?” en «Express Yourself», se dirige a las mujeres heterosexuales y a su audiencia homosexual. ​Además, su acercamiento al “voguing” (popularizando una tendencia hasta entonces alternativa) solidificó su imagen de heroína de una cultura gay underground que se empeñaba en superar la represión social y su propia doble moral, que le imponía mantener cerradas las puertas de los armarios. En 1992, la artista publicó su disco “Erotica”, donde hace alusión en algunos temas a la homosexualidad y el sida, cuando varios de sus amigos murieron a causa de esta enfermedad. Ese mismo año, acompañó al disco con la publicación de su libro “Sex”, cuyo contenido incluía, entre otras imágenes, algunas de cargado contenido homoerótico.

Lo cierto es que Madonna rompió con el tabú de la homosexualidad y esta simbiosis llevó a la Universidad de Oviedo en 2015 a incluir una clase en el aula de extensión sobre la artista, llamada “Te quiero-te odio: la relación del público homosexual con Madonna”.

Madonna ha realizado varias obras de apoyo a la comunidad LGBT y ha ofrecido comunicados y discursos a su favor. En una oportunidad, Madonna explicó que “las mujeres están perdidas sin los “maricones””.

En noviembre de 2010, Madonna hizo una aparición especial en el programa de entrevistas The Ellen DeGeneres Show para hablar sobre el acoso a niños y adolescentes, incluyendo la intimidación de los homosexuales y suicidios relacionados.

En junio de 2011, Madonna instó a sus seguidores a apoyar el matrimonio entre personas del mismo sexo en Nueva York y en marzo de 2013, Madonna presentó el premio Vito Russo al periodista abiertamente gay, Anderson Cooper, en la vigésima cuarta entrega de los GLAAD Media Awards.

La revista Out comenta que ella “llegó a ser un icono gay antes de que fuera a serlo” y el antropólogo social Carlos Granés llegó a la conclusión que Madonna reivindicó a los homosexuales como Warhol. Los autores de la Enciclopedia Gay escribieron que “Madonna siempre va más allá de lo que habíamos soñado, nos regala precisamente aquello que ni siquiera sabíamos que queríamos. La cultura gay para ella no es punto de llegada sino mero material, y en ese “ninguneo imperial” se eleva por sobre el común de las mortales y nos conquista para siempre. Todo lo que hace, en suma, es una lección magistral en uso y abuso”.

Con sus claros y sus oscuros, como cualquier mortal, Madonna Louise Veronica Ciccone te deseamos en Loottis un ¡Feliz Día de cumpleaños!