Lugares por descubrir por los viajeros LGBT en Castilla-La Mancha en otoño
Ciudad Real
Ciudad Real es tierra de parques naturales como el de Tablas de Daimiel y Lagunas de Ruidera pero también tiene un paisaje poblado de los famosos molinos que combatió Don Quijote de la Mancha. La ciudad está repleta de monumentos eclesíasticos como la Catedral de Nuestra Señora del Prado, las iglesias de San Pedro (donde está el sepulcro de Fernando Alonso de Coca), la de Santiago y sus famosos dragones en el ábside o los convento de las Carmelitas Descalzas, de la Merced, actual museo o de las Dominicas de Altagracia. Entre los monumentos civiles destacan la Puerta de Toledo, la Casa del Arco (el que fuera primer Ayuntamiento, el Hospital de la Misericordia o el Palacio de Medrano.
Nuestra recomendación de alojamiento es:
Se sitúa en Corral de Calatrava a 3,5 Km. del pueblo. Cuenta con un salón de 60 m2 con chimenea perfecta para inolvidables y mágicas noches de invierno, unida al salón se encuentra una cocina que incluye barbacoa facilitando reuniones de familias y amigos. Para el descanso nocturno cuenta con 3 habitaciones dobles, dos con cama de matrimonio y la otra con doble cama. Al encontrarse en plena naturaleza, podremos disfrutar de un conjunto de sensaciones al amanecer, durante el día tanto si es soleado o cerrado y los atardeceres de la mancha llenos de aromas, colores y sonidos que nos proporcionaran momentos especiales.
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