Descripción
El primero de nuestros “nidos” recibe su nombre de la forma de llamar en la zona al “raitán” o petirrojo, un ave sociable y confiado que vive en jardines, matorrales y cerca de pequeñas casas de los pueblos como si se tratara de una mascota. Es una casa de piedra y madera de dos plantas, con una acogedora chimenea.
El segundo de nuestros “nidos” recibe su nombre de la forma con la que se conoce a un ave muy común en la zona, como es el mirlo. Esta es una casa de una sola planta y con una estupenda terraza para disfrutar de una botella de sidra al atardecer después de un día de visitas por la zona.
Ubicadas en una pequeña aldea típica asturiana de apenas 40 habitantes situada en medio de la naturaleza y con unas maravillosas vistas a los Picos de Europa. Nuestras casas son el lugar perfecto para pasar unos días relajados y unas vacaciones inolvidables.