La CUP la lía parda con unos carteles que exigen la legalización del cruising en una playa de Tarragona

No es la primera vez que Arran, la Organización juvenil de l’Esquerra Independentista de Catalunya, CUP, realiza campañas reivindicativas que ofenden a ciertos colectivos. Con su lema “¡Las lesbianas también queremos, también follamos!” y la publicación de un vídeo donde dos chicas que visitaban el santuario de la Mare de Déu de Montserrat se besaban y tocaban apasionadamente ante la imagen de la ‘Moreneta’ para reivindicar el Día de la Visibilidad Lésbica, tuvo muchas reacciones tanto positivas como negativas.

Lejos de cejar en su intento provocativo, acaban de diseñar una nueva campaña que reclama a las autoridades locales que abran de nuevo la zona boscosa del “Camí dels Morrots”, en la playa tarraconesa de la Savinosa. Arran denuncia que el Ayuntamiento hostiga y persigue al colectivo gay e incluso que se ha llegado a multar a quienes han sido sorprendidos practicando cruising en esta popular zona al aire libre.

Como en Arran no hacen campañas a medias tintas han lanzado dos carteles que han incendiado las redes sociales por su contenido provocativo. Uno de ellos lleva por lema “A Tarragona fa seclès que la vostra mà dura ens la fotem pel cul” (que traducido al español significa “En Tarragona hace siglos que nos metemos por el culo vuestra mano dura”) donde muestra a uno de las santos patrones de la ciudad, San Magín (cuyos ojos están tapados con un cartel en el que se lee “Santsura”, una combinación de “Santo” y “censura”), a punto de introducirse por el ano el brazo de Santa Tecla, la otra patrona, una reliquia de la santa que está en la ciudad desde el año 1321. Arran considera a la Iglesia como “institución propagadora del odio contra las personas LGTBI y de haber instaurado en la sociedad una represión constante hacia las personas con géneros y sexualidades diversas”, explican en Facebook.

El ayuntamiento, los políticos y la policía también se llevan lo suyo, ya que en otro cartel muestra al alcalde Félix Ballesteros, del PSC, al portavoz del PP en el Parlament y exconcejal, Alejandro Fernández, y a un agente de la policía local haciendo “un trenecito” sobre un coche policial en Cala Romana, lugar habitual de la práctica de cruising. La CUP considera que la prohibición oculta una “política homófoba”. La campaña lleva como eslogan “Folleu, folleu perquè mentre folleu no ens multeu!” (“¡Follad, follad, porque mientras folláis no nos multáis!”).

Así, Arran pretende conmemorar el Día contra LGBTfobia del próximo 17 de mayo y el 28 de junio, Día para la Liberación Sexual.

La Asociación de Familias Lesbianas y Gays de Cataluña asegura que acciones como ésta perjudican más que ayudan. “Nos parece de muy mal gusto, la verdad. Pensamos que lo que provoca es rechazo y no aceptación, precisamente, de la diferencia. Encuentro que es una falta de respeto a la cultura, es ofensivo. Es una campaña que pienso que está reduciendo la sexualidad gay a una visión tópica y muy machista”, dice la portavoz, Elisabeth Vendrell.

La polémica está servida.