Cristo Contreras cuenta en Sábado Deluxe que le echan maldiciones: “Estoy muy orgulloso de ser gitano y gay”

Cuatro miembros del exitoso reality de Los Gipsy Kings que cada miércoles en prime time emite Cuatro acudieron la noche de este viernes al Sálvame Deluxe para hablar sobre su popularidad y recibir sorpresas. Una de las entrevistas que se esperaba con mayor interés fue la del estilista, fashionista diseñador y el Eduardo Manostijeras del popular barrio de las 3000 viviendas de Sevilla, Cristo Contreras.

Contreras contó algunos de talles sobre su vida demostrando estar encantado con la fama y que no tiene abuela “Esto es lo mío… la moda no sería nada sin Cristo Contreras… he tardado una semana en elegir look para venir al programa… a mis 27 años soy un gusto para el paladar como los Ferrero Rocher… salgo de la ducha con cuidado para que no me caiga una gotita en la cara y me barnizo de crema…”.

También le sacaron un asunto espinoso como el de si se ha sentido rechazado por los suyos por su condición sexual a lo que Cristo contestó: “Me han echado maldiciones por ser homosexual pero no quiero entrar en este tema porque estoy muy orgulloso de ser gitano y gay”, respondía con su característico desparpajo.

Sobre cuándo le dijo a sus padres que era gay, el estilista contestó: “No hizo falta decirles nada porque se me notaba. Tengo 5 hermanas y me pasaba todo el día con el peine y las tijeras en la mano”. Jorge Javier Vázquez le preguntó si tenía un novio parisino, a lo que Contreras contestó: “Tengo conocidos, no novios… ese chico no me convenía… No pienso casarme, ¿Te crees que yo me voy a meter en un compromiso tan grande con todo lo que me queda por vivir?… “

Sobre la peligrosidad de la barriada en la que vive, Cristo fue claro: “En las 3000 hay gente buena y mala, como en cualquier barrio de ricos donde también hay violencia”.

Alonso Caparrós le planteó el reto de que le cortara el pelo en directo pero Cristo se negó: “No voy a mancharme de pelo este look que he tardado más de dos horas en ponerme”. Sobre los consejos que le dan sus padres, el estilista dice: “me dicen que sea yo mismo y no cambie….”. También contó que le encanta la noche y la fama: “Salgo mucho de noche y ya hago bolos y como soy una estrella la gente me deja sus teléfonos escritos en los bolsillos”. Cristo volvió a demostrar que no le gusta hablar de sexo en público: “Le debo un respeto a mis padres…” y a la pregunta de Lidia Lozano de si se enamoraría de un payo, el peluquero le contestó: “Qué importa que sea asiático, payo o árabe… lo importante es el interior de la persona”.

Por su parte, Las Salazar, Raquel y Noemí (madre e hija creadoras del brilli cueri para el Orgullo Gay) también dieron mucho que hablar con su anécdota sobre que atribuyeron uno sus diseños con el de Alexander McQueen.  Raquel contó que le hicieron una abdominoplastia y por quitarle “un kilo y medio de mondongo” quiso regalarle a la cirujana que le hizo la operación un vestido de 4.500 euros para que lo luciera en la boda de Kiko Matamoros. Una de las invitadas le pidió que le diseñara otro para un importante evento y “le dijeron que era igual al de McQueen… yo entonces no le conocía de nada a este diseñador y eso que me lo dijo una señora que había desfilado para John Galliano y para Channel…, entre otros”.

Noemí Salazar dijo que ahora es bloggera y youtuber y que da consejos de belleza y tutoriales de maquillaje. Nos dejó frases antológicas que seguro están haciendo que las de Femme se planteen montarle una manifestación en la puerta de su casa: “Una mujer vale lo que huele y yo valgo mi peso en oro… Una mujer que huele a cerveza es una machorra…. Si yo hubiera sido una chica paya hubiese sido una golfa…”.

Jorge Javier le preguntó por la tradición gitana de la prueba del pañuelo y cómo era el dolor que te hacían pasar y ellas contestaron: “Eso es muy íntimo pero es la prueba de la honra de una familia y el día más importante de cualquier mujer gitana”.

Las Salazar dijeron que se sentían como las Kardashian en versión española y cuando Jorge Javier les dijo que no les gustaban porque la madre del clan apoyaba a Trump, Crsito le contestó: “Será porque ambos tienen pan de oro en las paredes de sus casas”. Así nos enteramos de un spoiler sobre el cuarto de baño forrado de plata y swarovski de las Salazar que nos espera en los Gipsy Kings.

Las sorpresa que les deparó a los cuatro invitados en el Sálvame Deluxe fue el reto de transformar a la cantante Carolina Sober en una auténtica novia gitana por el equipo formado por la diseñadora Saray Montoya y el estilista Cristo Contreras.

Mientras que Las Salazar convirtieron a la ex actriz porno, María Lapiedra, en una invitada a una boda gipsy con su fashionista modelito creado en el atelier de Raquel Salazar.